CRÓNICA : EL GUANACO: UN TESORO EN PELIGRO

 

Cronistas: Abel Aguilar Pérez, Joan Aguilar Rosario, Danny Horna Chavez, Vera Medina y Jordan Delgado Castañeda 5TO D - I.E SAN JUAN. 

Nosotros, estudiantes del Colegio San Juan del 5"D", nos adentramos en el fascinante mundo del guanaco, un mamífero majestuoso propio de América del Sur. En nuestro viaje por la vida silvestre, descubrimos su singular belleza y la amenaza que enfrenta su existencia. Acompáñanos en este recorrido mientras exploramos la vida y los desafíos del guanaco.

Descubrimos que el guanaco, con su pelaje marrón rojizo y su imponente altura de aproximadamente 1,60 metros, es una especie salvaje que habita las vastas llanuras de América del Sur. Durante la época de celo, que transcurre entre noviembre y febrero, los machos se vuelven agresivos y luchan por el derecho de aparearse con las hembras. Después de once meses de gestación, nace una sola cría, conocida como chulengo. Su sistema de apareamiento es poligámico, es decir, que los machos compiten por el derecho de aparearse con múltiples hembras durante la época de celo, añadiendo así complejidad a su dinámica social.

En 1969, el Comité Americano (Protección Internacional de la Vida Silvestre) alertó sobre la situación crítica de las poblaciones de guanacos y vicuñas en el Perú, donde el gobierno peruano respondió rápidamente, declarando a ambas especies como amenazadas. Sin embargo, mientras la vicuña logró un exitoso rescate, el guanaco permanece virtualmente desconocido para la ciencia y al borde de la extinción. Y solo se estima la existencia de alrededor de 5,000 ejemplares, de los cuales 3500 se encuentran en el Perú. Estudios como el de Franklin (1975), citado por Puig (1995), sugieren que en la Reserva Nacional de Calipuy habitan entre 300 y 500 ejemplares, lo que resalta la urgencia de proteger su hábitat y promover su conservación. Al explorar el territorio peruano, lamentablemente, nos hemos percatado de que el guanaco ha sufrido una retracción alarmante del 75 % en su distribución. Pues, el guanaco se ha extinguido en amplios territorios de los departamentos de Áncash, Huánuco, Junín, Lima y Piura. En Apurímac, solo quedan 9 ejemplares, mientras que en Puno se cuentan 71, en Tacna 95 y en Huancavelica 211 guanacos. Afortunadamente, poblaciones importantes sobreviven en la puna del distrito de Chavín del Departamento de Ica, con 516 ejemplares, y en Huallhuas, Ayacucho, con 1167 ejemplares. Además, una manada de 12 guanacos ha logrado establecerse luego de ser reintroducida en la reserva privada de Chaparrí, en el litoral de Lambayeque. Antiguamente, extendía su presencia incluso por los desiertos costeros, pero hoy su protección se limita a reservas naturales como la Reserva Nacional Salinas y Aguada Blanca. Históricamente, con la llegada de los españoles a Sudamérica, marcó el inicio de su declive, pasando de una población estimada en 50 millones de ejemplares a apenas 1.5 millones. Nos duele constatar que la caza, principalmente por su piel y para expandir pastizales para ovejas, ha diezmado sus números de manera alarmante.

Recientemente, en febrero de 2024, una luz de esperanza ha iluminado el camino del guanaco al ser incluido en la lista de la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS). Esta decisión, fruto de una iniciativa regional que involucró a científicos y organizaciones de varios países sudamericanos, reconoció las amenazas que enfrenta esta especie. Enfrentamos desafíos urgentes como el sobrepastoreo ganadero, la aridez creciente debido al cambio climático y la caza. La presencia de alambrados en los campos obstaculiza su migración y acceso a alimentos. La inclusión del guanaco en la lista de la CMS representa un paso crucial para fortalecer iniciativas de conservación y promover prácticas de manejo sustentable en su hábitat a lo largo de la Cordillera de los Andes.

Más adelante, la lana del guanaco fue altamente valorada en el mercado internacional por su suavidad y calidez. Aunque algunos ejemplares viven en cautiverio para la producción de lana, los esfuerzos por capturar, esquilar y liberar guanacos silvestres se han intensificado desde finales de la década de 1990. Sin embargo, su principal depredador, el puma, continúa representando una amenaza constante para su supervivencia. En ocasiones, el zorro culpeo también se convierte en un depredador, como se observó en la reserva Karukinka, en Tierra del Fuego, a partir de 2007.

En nuestra travesía por el mundo del guanaco, hemos sido testigos de su lucha por la supervivencia en un entorno cada vez más amenazado. Su inclusión en la lista de la CMS nos brinda esperanza y nos recuerda la importancia de unir esfuerzos para proteger a estas criaturas emblemáticas. Como estudiantes comprometidos con la conservación de la vida silvestre, nos comprometemos a seguir aprendiendo y trabajando para garantizar un futuro donde el guanaco pueda seguir galopando libremente por las vastas llanuras de América del Sur.

RECUERDA:  "Juntos, protegeremos a las criaturas emblemáticas como el guanaco para garantizar un futuro donde puedan seguir galopando libremente por las vastas llanuras de América del Sur."